Bitácora 1
Título: 36 kilos
Autor: M.B. Brozon
Páginas leídas: 7- 65
En 36 kilos, encontramos a dos jóvenes, Regina y Fernanda. El libro
está contado desde la perspectiva de esta última, quien narra su historia en el
último año de preparatoria junto a su mejor amiga. Juntas, han vivido y están
viviendo experiencias que vamos conociendo a lo largo de las páginas. Lo cierto es que hasta el momento, la obra ha
dado indicios de la enfermedad que seguramente tomará más importancias en las
siguientes páginas, la anorexia.
Mónica Brozon, nacida en México,
utiliza un lenguaje juvenil y propio de su país. Eso está justificado, pues
creo que lo hizo para atraer a un público de adolescentes, pero también
ocasionó en algunas ocasiones que no pudiera comprender totalmente algunas
oraciones o que no fueran de mi agrado. Un ejemplo es: “Y, debo decirlo
también, yo no tengo nada, por ejemplo, contra una jícama con limón y chile.”(Brozon,
2008, p.30)
Por otro lado, encontramos a las
protagonistas. Regina y Fernanda son dos chicas más o menos parecidas, pues su
situación económica es totalmente diferente. Mientras que Regina siempre ha
gozado de ciertos lujos, Fernanda ha tenido que ajustarse en ciertos momentos
junto a su familia, tal como se evidencia en: “Y sé que ella no me cuenta las
cosas por presumirme, sé que si pudiera pagarme el club lo haría. Pero ni modo
que le pida a su papá que le mantenga sus lujos a esta especie de hija colada.”
(Brozon, 2008, p. 33) Yo pienso que lo anterior hace que Regina sea un poco más
engreída o la “líder” entre las dos, ya que Fernanda es más humilde y sencilla,
aceptando muchas veces como cierto lo que su amiga propone, pues se demuestra
en: “-Pero lo que sí te apuesto es que si tienes algún chance con él, se
multiplicará si te deshaces de cuatro o cinco kilos-. Y, como de costumbre,
debo admitir que miga tiene razón.” (Brozon, 2008, p.42) Lamentablemente, pienso
que eso tiene un punto negativo en la vida de Regina, pues sus papás no la
conocen del todo, como se sabe gracias a: “La mamá de Regina no sabe mucho de
mí. Ni de ella (…) Nunca hablan de niños por ejemplo.” (Brozon, 2008, p.34)
Un
punto que realmente me ha gustado es que trata temas con los muchos
adolescentes se puedan identificar. Uno de ellos es La sexualidad en la
adolescencia. Claramente, notamos que las protagonistas están interesadas en
eso y hasta planean actividades como el famoso Plan, el cual, al final acaba
mal, por la culpa de Regina. Esto me llamó bastante la atención, así como también
a la narradora, pues ella era la más entusiasmada en él. “Lo que me pareció
raro y sí me hizo enojar fue que hubiéramos hecho tanto trámite para que al
final se echara para atrás.” (Brozon, 2008, p. 64) También, está el tema de la
amistad, pues las protagonistas han compartido juntas muchos momentos (algunos
difíciles) y siguen siendo amigas. “Ya han pasado más de ocho años de eso, pero
me acuerdo muy bien. Sé que empezó en la escuela (…) Ni fue allí donde Regina y
yo discutimos más largo y tendido sobre el tea, sino después, cuando llegamos a
su casa.” (Brozon, 2008, p.7) A mi parecer, es algo muy rescatable para los
jóvenes, pues muchos confunden la amistad con otros sentimientos.
En general, hasta el momento me parece una obra que engancha rápido a su público objetivo, pero ha tenido algunos aspectos que no han terminado de agradarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario